La seguridad de casi todo lo que tienes en tu entorno digital depende de cómo de difícil sea descifrar tus contraseñas (incluida la del banco) y cómo las guardas.
El desafío está en crear contraseñas seguras que, además, puedas recordar sin hacer uso de esos atajos como reutilizar la misma contraseña para varias cuentas.
¿Cuáles son las formas correctas e incorrectas de usar contraseñas? Hace no mucho, una contraseña de seis símbolos era lo suficientemente segura, ahora los usuarios deben inventar combinaciones que consisten en, al menos, ocho símbolos de la mano de técnicas de autentificación como escáneres de huellas digitales y los CAPTCHA.
Estas medidas adicionales varían de un dispositivo a otro y todas ellas conllevan sus propios problemas específicos. Por eso las contraseñas son inevitables. Entonces, aclaramos, ¿cuáles son las formas correctas e incorrectas de usarlas?
1. Error de principiante
El nombre propio y otras combinaciones no son buenas cuando se trata de contraseñas. Es por eso que uno debe olvidarse de variantes como 123457, el nombre de un familiar o tu fecha de cumpleaños.
2. Tampoco uses palabras extranjeras.
Los hackers tienen diccionarios especiales que contienen combinaciones en todos los idiomas, por lo que este método no ofrece seguridad adicional aunque a ti te lo parezca.
3. Es mejor inventar una contraseñas sin sentido
Pero confiable. Sabemos que es bastante difícil recordar una combinación así, pero puedes aprender fácilmente símbolos y figuras que significan algo personal para ti.
4. Otra buena forma de recordar una contraseña es escribirla en un teclado unas cuantas veces.
Así, por inercia, comenzarás a escribirla automáticamente sin tener que preguntarte «¿Cuál era el significado?»
5. Recuerda que una buena contraseña siempre debe contener dígitos, letras y símbolos especiales.
Más importante aún, debe haber letras mayúsculas y minúsculas.
6. Nunca compartas tu contraseña con nadie, ni siquiera el método que utilizaste para crearla.
Por ejemplo, si los hackers descubren que has usado palabras de una canción, pueden examinar tus redes sociales y, por lo tanto, descubrir más contraseñas.
7. No uses la misma contraseña para todo.
Si es una vez descubierta olvídate del resto. El efecto dominó hará que el hacker secuestre tus cuentas una tras otra.
8. Si compartes dispositivos móviles con familiares o amigos, nunca les digas tus contraseñas.
No tiene nada que ver con la desconfianza, ¿pero quién te dice que ellos vayan a tener el mismo cuidado que tú?
Ten en cuenta a partir de ahora y siempre estos consejos para mantenerte a salvo de una estructura cada vez más amenazante. No hay que tener miedo, pero si control sobre tu información y como la guardas.
Be safe my friend!